La dependienta (コンビニ人間)
Sayaka Murata
2016
Duomo Ediciones
Keiko Furukura tiene 36 años y está soltera. De hecho, nunca ha tenido pareja. Desde que abandonó a su tradicional familia para mudarse a Tokio, trabaja a tiempo parcial como dependienta de un konbini, un supermercado japonés abierto las 24 horas del día. Siempre ha sentido que no encajaba en la sociedad, pero en la tienda ha encontrado un mundo predecible, gobernado por un manual que dicta a los trabajadores cómo actuar y qué decir. Ha conseguido lograr esa normalidad que la sociedad le reclama: todos quieren ver a Keiko formar un hogar, seguir un camino convencional que la convierta, a sus ojos, en una adulta.
Esta novela me ha enamorado. Se ha debido especialmente a que yo también trabajo en un konbini y he entendido a la perfección los sentimientos de la protagonista en la tienda. La sociedad japonesa es muy estricta y cuando una persona llega a cierta edad y aún no ha formado su propio hogar, hay un claro rechazo hacia ella. Existe un término despectivo en japonés que se usa para este tipo de mujeres: make-inu 負け犬 (lit. perro perdedor). Me ha pasado también cuando me preguntan por mi edad y les sorprende saber que no estoy casada y no tengo intención de tener hijos en un futuro próximo. Las mentes cerradas que se entrometen en la vida de los demás e intentan cambiar la felicidad de la otra persona porque lo que hace no es "correcto" lo representa estupendamente este libro. La protagonista intentará crear una falsa realidad para que sus seres queridos más cercanos se tranquilicen pero, finalmente, acaba aceptando que ella solo conseguirá ser feliz con el trabajo de vida simple del konbini.
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